Hay que esperar, pero si me viera algo mal, me volvería a operar la nariz”. Así de contundente se mostraba Belén Esteban, dos meses después de someterse a su primera rinoplastia, en noviembre de 2009. Entonces ya tenía torcido su apéndice nasal y el tabique empezaba a hundírsele, según señalaban los expertos. Han tenido que pasar casi dos años para que Belén haya dado el paso y vuelva al quirófano.
La intervención tuvo lugar el pasado 8 de octubre en el Centro Clínico Menorca de Madrid. La colaboradora de Sálvame no quiso repetir con el Dr. Vila-Rovira, de la Clínica Teknon de Barcelona. Se puso en manos del Dr. Linares por un sencillo motivo: Belén aprovechó la anestesia y, en la misma operación, el Dr. Navarro le cambió sus prótesis mamarias.
Esta no tiene arreglo mientras no se opere el cerebro.Que no vuelva más, por favor. No la soporto.
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